Todo comenzó en noviembre de 2008. Dolores en el cuello que no se iban, luego un bulto pequeño en el lado derecho del cuello. Con todo esto, me pidieron distintas cosas como kinesiología en la zona, cambiar la almohada y hasta cambiar la computadora del trabajo de lugar, pero una noche me agarro un dolor extraño en la zona derecha del abdomen que si respiraba me dolia y asi estuve 5 minutos durísimos. Luego de todo esto, el medico clínico me mandó realizar una radiografia con contraste y en febrero 2009, luego de volver de vacaciones, fui a consultar a un hematólogo por el resultado. Fui ahí que conocí el linfoma de hodking. La zona afectada además del cuello fue el mediastino. Desde ese momento pase por un cronograma de 12 sesiones de quimio y en septiembre hice 10 sesiones de radioterapia. Lamentablamente, no funciono y tuvimos que cambiar los esquemas buscando uno mas agresivo ya que no había habido muchos cambios en su tamaño. Pase por internaciones de 5 días cada 21 días donde fue difícil recuperarse de una a otra sesión. No funciono y pasamos a un nuevo esquema sin internación pero agresivo como el anterior. Si bien el tamaño se redujo, fue minimo con el agregado de sufrir llagas en la lengua teniendo dificultades para alimentarme. Las fuerzas iban mermando pero había que seguir, con la ayuda de la familia. Aquí fue duro porque ya se habían agotado los tratamienos. Tuvieron, tuvimos que cambiar nuevamente el esquema con internación y tomando la decisión de encarar el autotrasplante. Pero antes le tomaron muestras a mi hermano que No fue un ciento x ciento compatible. Asi que fue autotransplante. Eran 4 las sesiones, pero el momento mas difícil fue entre la tercera y la cuarta, toque fondo, el cuerpo ya no quería más y fue ahí que sentí un click en mi animo, me fortaleci mucho con la fe y pensando que podía seguir luchándola. Así fue que el 09 de Noviembre 2010 hicimos el autotransplante que duró 21 días de internación pero con el animo por las nubes, mucho amor de todos y mucha ayuda del cuerpo de enfermeras/os y del cuerpo de medicas/os de fundaleu. En enero y febrero de 2011 realice 30 sesiones de radioterapia. La espera fue larga y dura, pero el estudio de abril de 2011 dio la gran noticia que ya no había actividad de los linfomas. Hoy puedo disfrutar mi vida en total normalidad, trabajando, haciendo deportes, paseando, viviendo pero siempre buscando la forma de disfrutar cada uno de los momentos que pueda estar viviendo y viendo las cosas de una manera totalmente opuesta a la de antes. Espero les sirva que se puede, aún pasando por momentos con bajones emocionales y corporales, la fe que podemos luchar y dar batalla no tiene que faltar. Besos.
Germán Bertino